- Insisten en su reclamo de justicia las víctimas del padre Maciel
- El fundador de los Legionarios falleció a los 88 años en Houston, Texas
- Proceso, 2008-01-31 # Rodrigo Vera · México D.F.
Con la muerte de Marcial Maciel Degollado, no cesarán las demandas por los abusos sexuales que cometió contra menores de edad el influyente prelado. Estos reclamos ahora estarán dirigidos contra los Legionarios de Cristo, por haber encubierto sus delitos.
José Barba, quien encabeza al grupo de víctimas del padre Marcial, adelanta:
“Nuestras acusaciones ahora irán dirigidas contra la Legión de Cristo, porque es la institución que encubrió durante años a Maciel”.
De esta manera, Marcial Maciel provocará impugnaciones post mortem, luego de haber fallecido, el pasado miércoles 30, a los 88 años en una comunidad de su congregación localizada en Houston, Texas, ciudad en la que recibía atención médica.
Javier Bravo, vocero de los Legionarios en México, señaló que el controvertido sacerdote falleció de “muerte natural” debido a su avanzada edad:
“Él estaba viviendo en tranquilidad y paz espiritual, en una casa de nuestra comunidad, en la ciudad de Houston. Ahí falleció de muerte natural, a causa de su edad”.
El vocero niega así algunas versiones que corren en torno del deceso, en el sentido de que, a fines de diciembre pasado, Marcial Maciel tuvo un derrame cerebral, el cual provocó su muerte. “Esa versión es falsa. El padre Marcial jamás tuvo un derrame cerebral”, dijo.
Bravo indicó que, tan pronto se supo de su muerte, “las comunidades de los Legionarios de Cristo, desplegadas en 40 países, están en vigilia y oración, pidiendo por el eterno descanso de su alma”.
A través de su página de Internet, los Legionarios de Cristo hicieron circular las últimas recomendaciones que, por escrito, les dejó su fundador: “Servid constantemente al Señor. Que la esperanza os tenga alegres. Estad firmes en la tribulación, sed asiduos en la oración”.
El 19 de mayo de 2006, el papa Benedicto XVI castigó a Marcial Maciel a llevar “una vida reservada de oración y de penitencia, renunciando a todo ministerio público”.
Esta fue la condena papal debido a las acusaciones de pederastia que pesaban sobre Maciel, y que incluso lo llevaron a afrontar, desde los años cincuenta, procesos judiciales en El Vaticano.
A partir del castigo del Papa, Marcial Maciel vivió prácticamente en retiro, radicando tanto en el municipio michoacano de Cotija –su pueblo natal-- como en Roma. Viajaba también a Houston para realizarse chequeos médicos.
Desde 2005 había entregado formalmente las riendas de los Legionarios de Cristo al sacerdote Álvaro Corcuera, pero se decía que, en realidad, Mon Pére (“nuestro padre”) –como le llamaban a Maciel-- seguía tomando las decisiones importantes.
Las víctimas que fueron abusadas sexualmente por Marcial Maciel formaron un sólido grupo, integrado por exlegionarios y con José Barba a la cabeza. Ellos siguieron pidiendo un castigo mayor para el sacerdote michoacano, pues consideraron demasiado tibia la sanción del Papa.
Ahora, con la muerte de Maciel, José Barba señala:
“Sería demasiado simplista decir que con la muerte de Maciel terminaron nuestras demandas. De ninguna manera, pues nuestras acusaciones también van dirigidas a la Legión de Cristo, porque es la institución que encubrió durante años a Maciel, acallando las protestas de sus víctimas. No nos anima un espíritu de venganza, sino de justicia”.
--¿Qué acciones legales emprenderán contra los Legionarios de Cristo?
--En este momento no podemos revelar las acciones que emprenderemos, por razones de estrategia legal.
Por su parte, Alejandro Espinosa, autor del libro El legionario –donde relata los abusos sexuales que sufrió por parte de Mon Pére--, señala:
“Aquí no vale el dicho de que muerto el perro se acabó la rabia. Nada de eso. Nuestras demandas ahora estarán enfocadas contra los Legionarios de Cristo, que no es más que una secta fanatizada que ha cometido muchas tropelías”.
Hijo de Maura Degollado, quien está en proceso de canonización, Marcial Maciel nació el 10 de marzo de 1920, por lo que durante su infancia le tocó vivir la guerra cristera. Hizo parte de sus estudios en el seminario de su tío Rafael Guízar y Valencia, quien fue arzobispo de Jalapa, Veracruz, y recientemente canonizado.
En 1941, Marcial fundó los Legionarios de Cristo. Y después, en 1959, creó el movimiento de laicos llamado Regnum Christi.
La rápida expansión mundial de los Legionarios obedeció a sus alianzas con las elites políticas y empresariales de cada país. En México, por ejemplo, Marcial Maciel fue amigo y confesor de importantes personajes de la política, desde el presidente Miguel Alemán hasta Vicente Fox.
Fue también muy allegado a prominentes familias del empresariado mexicano: los Azcárraga, Garza Sada, Servitje, Slim, Arango…
Según el libro "La prodigiosa aventura de los Legionarios de Cristo", de Alfonso Torres Robles, Marcial Maciel logró construir un “formidable imperio educativo” a escala mundial, con una decena de universidades, 145 colegios, 21 institutos superiores y 630 centros de apostolado.
El vocero Javier Bravo señala que, actualmente, la Legión cuenta con 751 sacerdotes, 2 mil 500 seminaristas y alrededor de 70 mil militantes del Regnum Christi.
Y sobre los funerales y el sepelio de Maciel –que hasta el cierre de esta edición se ignoraba dónde se realizarían--, Javier Bravo adelanta:
“El deseo de nuestro fundador fue tener unos funerales sencillos y muy privados, en un clima de intensa oración. Y así serán”.
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