- Sorprenden a un alumno grabando con el móvil a mujeres en un baño de la UPV
- Una empleada de la limpieza lo descubrió en la Politécnica de Donostia. Los alumnos denuncian la agresión sexista y exigen medidas contra el implicado
- Noticias de Gipuzkoa, 2008-11-22 # Ana Ursula Soto · Donostia
Un joven de 19 años fue sorprendido el pasado lunes cuando realizaba grabaciones con el móvil en el baño de mujeres en la Escuela Politécnica del campus guipuzcoano de la UPV. Los alumnos, indignados ante lo sucedido, han colgado carteles en las puertas de la facultad en los que denuncian esta "agresión sexista" y critican a la institución por no haber hecho nada, de momento, contra el presunto agresor.
La universidad declinó hacer ningún comentario ayer, aunque fuentes de la institución señalaron que "se tomarán las medidas oportunas". Tampoco el Departamento vasco de Interior quiso dar información sobre lo ocurrido, pese a que intervinieron en el suceso, porque el presunto autor de los hechos se encerró durante casi una hora en el baño tras ser descubierto, según relataron a este periódico alumnos de la Escuela Politécnica.
Los hechos tuvieron lugar el pasado lunes por la tarde, cuando un estudiante de primero de Electrónica, supuestamente, se encontraba en uno de los baños de mujeres de la quinta planta del edificio grabando vídeos con su móvil mientras éstas hacían sus necesidades. Al parecer, introducía la mano disimuladamente a través del espacio libre que queda entre la puerta de los retretes y el baño, de un palmo aproximadamente.
Sin embargo, en una de estas ocasiones, no se dio cuenta de que, en realidad, estaba grabando a una empleada mientras limpiaba el retrete. Cuando se percató, los nervios le traicionaron y se le cayó el móvil al suelo, lo que originó que el aparato tirara una foto que alertó a la mujer. Al ser descubierto, el joven se encerró en uno de los baños durante cerca de una hora, por lo que se alertó a la Ertzaintza para que lo desalojaran, según relataban ayer dos estudiantes de Ingeniería Mecánica.
Estas jóvenes señalaron que se enteraron de lo ocurrido porque el día anterior un profesor les alertó de que tuvieran cuidado porque el joven podría tener otros cómplices. "No creo que ahora se atrevan a hacerlo", comentaba una de ellas.
Aún así, el miedo se ha extendido entre muchas de las mujeres de la escuela, que hacen cábalas pensando en si en el momento en que fue pillado in fraganti el joven habían estado ellas en el baño.
Otras, no obstante, le restan importancia, como una universitaria que ayer comentaba lo ocurrido: "Yo estaba en clase y no me enteré de nada, pero luego, cuando acabamos, vi a la Ertzaintza. El joven no quería salir del baño y tuvieron que sacarlo".
Según ha podido saber este periódico, la Policía le encontró dos vídeos grabados ese mismo lunes, aunque se desconoce si ha realizado más, con qué objetivo y cuáles eran sus intenciones. Incluso se ha llegado a hablar de una apuesta entre amigos.
De momento, los alumnos han mostrado su rechazo por lo acontecido y en los carteles manifiestan que no "se pueden aceptar ataques sexistas de este tipo". Y es que, según afirmaban los estudiantes, el joven acudió al día siguiente a clase "como si no hubiera hecho nada".