- Un brasileño mata a su mujer a golpes ante sus dos hijos pequeños en Vigo y se fuga
- Los niños alertaron de la agresión a unos vecinos. El cuerpo de la joven, de 25 años, estaba bajo un colchón
- Faro de Vigo, 2008-08-18 # M. Fontán · Vigo
Nuevo crimen en Vigo. Una joven brasileña de unos 25 años de edad, Aelica Dacosta, apareció ayer muerta en su domicilio de la Travesía de Vigo con un fuerte golpe en la cabeza y con signos aparentes de haber sido apaleada. El supuesto agresor es su marido, de la misma nacionalidad que la víctima, que se dio a la fuga y al que al cierre de esta edición buscaba un amplio dispositivo de la Policía Nacional. Fueron los dos hijos pequeños del matrimonio -un niño y una niña de unos 3 y 4 años que estaban en la casa cuando se cometió el homicidio- quienes avisaron a unos vecinos. Este asesinato se produce sólo una semana después del apuñalamiento del joven José Benavides en su vivienda de Coia.
Todo ocurría en torno a las ocho de la tarde en un domicilio ubicado en el séptimo piso del número 56 de Travesía de Vigo. Los dos niños bajaron hasta una vivienda del cuarto piso, donde reside otra familia brasileña, y le dijeron que su madre estaba mal. Al subir a la casa, descubrieron a la mujer en medio de un charco de sangre. Estaba en su dormitorio y al parecer tenía un fuerte golpe en la cabeza que, según diversas fuentes, pudo ser propinado con un adoquín o un ladrillo. De inmediato se avisó a la Policía Nacional y hasta allí, además de varias patrullas de la este cuerpo, se trasladó la Policía Local y el 061, cuyos sanitarios confirmaron la muerte de la joven.
Nadie vio ya al marido. Cuando los niños alertaron a los vecinos el hombre, del que algunos allegados dicen que tiene más de 40 años, ya se había dado a la fuga. Los padres y los tres hermanos de la fallecida residían en Vigo desde hacía unos dos años, según fuentes cercanas a la familia. La víctima de lo que todo apunta a que se trata un caso de violencia de género -el primero que se registra en la ciudad este año- se vino más tarde con sus hijos y su marido. El hombre había regresado a Brasil a arreglar unos papeles y volvió a la ciudad olívica hace sólo unos 15 días. La familia sospecha que tenía intención de volver de nuevo a su país natal. "Esta semana lo vieron en una agencia de viajes; es como si lo hubiese planeado", afirmaba ayer conmocionada una amiga de la fallecida, que aseguró que hace sólo una semana vio como el hombre le pegaba a uno de los niños y que estuvo a punto de llamar a la Policía.
Los padres y dos hermanas de la fallecida estaban en la Iglesia Evangelista, en O Calvario, cuando les comunicaron lo ocurrido. En el portal del edificio, apoyados por otros allegados, no pudieron controlar el llanto y el dolor cuando, casi a las once de la noche, retiraron el cadáver de Aelica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario